Mente ajena.

Es martes, sin embargo, yo me siento en sábado.
Típica sensación de vivir confundidos en el tiempo;todos lo sentimos.
"Siento que fuera Viernes", "¿Qué día es hoy?", etc.
La tarde parece venirse encima, perseguirme quizá, pero no sabe
que yo la ando esperando con ansias.
Mientras, la jaqueca aparece y yo la ignoro caminando por 
un periférico lleno de polvo y ruido. 
Lo odio.
Por fin a borbo de un destartalado camión, con un chofer que no me deja de mirar
y mi libro a un lado, me pongo a pensar en mi amor.
Y el tiempo se me va, no percibo que el camión que tomé fue equivocado
y ya se pasó la parada que me dejaba más cerca de  mi casa.
Ahora entiendo eso de "me pierdo en tí".